A la hora de elegir un determinado dibujo, ten en cuenta que cada uno de ellos esconde un significado específico. Descubre por qué te llaman la atención una serie de colores al escoger el mandala que quieres contemplar.
El color rojo se conecta con el primer chakra y es el representante de la pasión, la agresividad y la fuerza.
El naranja es el color del segundo chakra. Su significado se asocia a términos como la gloria, la vanidad, la energía y el progreso.
El amarillo está conectado a tu tercer chakra. Indica novedad, voluntad y alegría.
El verde es la representación de tu cuarto chakra. Si lo eliges es porque quieres recuperar tu conexión con la naturaleza, con tu parte más desenfadada y con la esperanza de poder seguir evolucionando.
El quinto chakra es el del color azul. Transmite ganas de comunicarte, respeto y calma.
El sexto chakra tiene conexión con el violeta y subraya tus ganas de crear algo distinto, de meditar y de buscar nuevos horizontes.
El séptimo chakra es el del color blanco. Está relacionado con tu deseo de encontrar el equilibrio, con tu bondad y también con tu timidez ante ciertas situaciones.
El rosa expresa tu altruismo y tu delicadeza.
El color oro es sinónimo de vitalidad.
Los tonos plateados aluden a tu bienestar y a tu capacidad extrasensorial.
Si el color predominante en tu elección es el negro, has de saber que expresa tristeza, pero también seguridad en ti, dignidad y un anhelo de experimentar sensaciones más profundas.
Si quieres profundizar mucho más en el significados de los colores en los mandalas te aconsejo echar un vistazo a este artículo donde se explica en detalles.